En medio del respaldo al plan libertario impulsado por el Gobierno, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha manifestado su inquietud ante la posibilidad de un estallido social en el país. Esta preocupación surge a raíz de la necesidad de evaluar el nivel de respaldo popular al ajuste económico implementado, debido al clima de tensión que se percibe en diversos sectores de la sociedad.
El respaldo financiero del FMI al plan económico ha llevado a una revisión de la situación social por parte del organismo internacional. Según fuentes cercanas, el FMI ha mostrado interés en conocer el grado de aceptación popular hacia las medidas de ajuste, buscando determinar si existe un respaldo suficiente que pueda amortiguar posibles tensiones sociales.
Mientras tanto, desde el Gobierno se insiste en destacar el porcentaje del balotaje como indicador de respaldo popular, señalando que el 56 por ciento obtenido en las elecciones refleja un respaldo significativo a las políticas implementadas hasta el momento.
Sin embargo, las preocupaciones persisten en relación con las medidas económicas futuras. Se ha especulado sobre la posibilidad de que el ministro de Economía, Caputo, busque nuevamente endeudarse para llevar a cabo una dolarización de la economía. Esta medida, si bien podría estabilizar el mercado cambiario, también generaría incertidumbre y posibles tensiones sociales ante los efectos que podría tener sobre la economía doméstica.
Ante este escenario, la sociedad y los analistas económicos se mantienen atentos a los próximos pasos del Gobierno y del FMI, con la esperanza de que se tomen medidas que conduzcan a un equilibrio económico sin generar un aumento en las tensiones sociales que actualmente preocupan a ambos sectores.
