«Estamos entrando en la peor etapa», dijo Mayra Mendoza

La Intendenta señaló que es por la transmisión comunitaria, pero consideró que cuando llegue el pico de casos la cantidad de camas -leves, generales y de Terapia Intensiva- estará cubierta. Además, no descartó que la cuarentena pueda seguir hasta que termine el invierno

La jefa comunal Mayra Mendoza estimó que en Quilmes la cuarentena podría continuar hasta que termine el invierno y admitió que, dada la transmisión comunitaria del coronavirus, «estamos entrando en la peor etapa».
En una conferencia de prensa, la Intendenta hizo un balance positivo del aislamiento obligatorio que se extendió por tercera vez en todo el país y advirtió que «en cinco días se duplicaron los casos», la mayoría de ellos de transmisión comunitaria.
Sobre la relajación de la cuarentena por parte de algunos vecinos, sostuvo que «el control tiene que ver básicamente con poner todo en la calle más ochenta nuevos policías que la Provincia destinó a Quilmes hace tres semanas, que están en tres lugares fijos del distrito: el Polideportivo, la Universidad y el club Quilmes».
Eso «ayuda al control, pero lo que nosotros necesitamos es poder tener control ciudadano, responsabilidad social, conciencia de que esto no es un capricho de los gobernantes de pedirles que sigan aburriéndose en la casa».
Por el contrario, «es la única medida que podemos tomar para que no haya un contagio masivo y que no tengamos que lamentar pérdidas como lo estamos viendo en las grandes ciudades del mundo».
Este lunes se informó que hay 57 vecinos con coronavirus y 733 casos sospechosos, con el deceso de tres enfermos.
«En Quilmes hay transmisión comunitaria. Comenzamos y estamos entrando en la peor etapa del virus. Estamos teniendo circulación viral y además estamos evidenciando con el nexo epidemiológico de los contactos estrechos de los casos confirmados que no está habiendo el suficiente cuidado ni las medidas que estamos planteando desde el primer día», explicó la Intendenta.
Es decir, se comparte el mate y vasos, no se respeta la distancia prudente entre el enfermo y sus allegados, no se respeta el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio.
Indicó que el uso del tapabocas «es una medida más» que ayuda a prevenir contagios, pero que no deben abandonarse las medidas de higiene y el distanciamiento social: «es a la inversa de lo que se planteó a nivel nacional. En cinco días duplicamos los casos».
«Es un desafío único, nunca lo vivimos como sociedad, pero hay que ser conscientes de esto», resaltó la titular del Ejecutivo comunal.
Para controlar las salidas innecesarias, se mostró contraria a las multas: «espero que tomen conciencia, no creo en una sociedad punitivista, sí en una sociedad responsable».
Mendoza dijo que se sigue cada caso positivo y se lo entrevista para saber qué hizo y con quiénes mantuvo contacto, pero nunca se puede saber si hubo un olvido o un hecho que el enfermo no reconozca como riesgoso. De allí que el seguimiento se complica al extremo. «El aumento de los casos tiene que ver con la transmisión comunitaria», sintetizó.
Si bien los contagios se dan en diversos sectores del distrito, sin diferenciación de estrato social, hay una preocupación especial por los barrios de La Paz y La Matera: «por eso pedimos que extremen las medidas».
Hay once personas desde la semana pasada en el Centro de Aislamiento de Emergencia de la Universidad Nacional de Quilmes que no pueden cumplir la cuarentena en su casa, pero la Intendenta pidió evitar la discriminación y estigmatización ya que los casos no están focalizados en ningún sector ni barrio de Quilmes.
También pidió a los empresarios que respeten los derechos de los trabajadores y que no obliguen a sus empleados a ocupar sus puestos laborales si presentan síntomas de COVID-19 «y corre riesgo hasta el mismo dueño del lugar».
Con respecto a las excepciones que se aplican en Quilmes, aclaró que se cumple la reglamentación dispuesta por el Gobierno bonaerense y el nacional.

La mandataria quilmeña apeló a la «responsabilidad social» para respetar el aislamiento obligatorio (foto Silvana Livigna)


Cuando llegue el pico de la pandemia, se necesitarán 104 camas de Terapia Intensiva, 260 leves o generales y centros de aislamiento para mil vecinos. «Contando los efectores privados», estimó Mendoza, la cantidad de lugares estará cubierta.
Para la titular del Ejecutivo, el invierno será la etapa más crítica, ya que se sumarán los casos de gripe, en tanto que el distrito también sufre actualmente una alta cantidad de contagios de dengue.

Línea municipal de atención al vecino

A disposición de los vecinos se encuentra el teléfono 0800 de atención municipal, todos los días de 8 a 22. «Hay un momento nomás que está colapsado que es de 10 a 12, cuando recibimos más de cien llamados. Allí se pueden atender las necesidades de cada uno».
Ante una consulta, Mendoza aseveró que su balance de la evolución de la epidemia hacia el verano será positivo si se evita «la mayor cantidad de muertes posible» y usó la frase del recordado líder de la UCD, Álvaro Alsogaray, para señalar que «hay que pasar el invierno».
Si bien Quilmes está en una situación crítica, «estamos entrando al peor momento», según expresó, la Intendenta cree que se puede abastecer la mayor demanda sanitaria posible.

«En Quilmes hay transmisión comunitaria» de coronavirus, advirtió la Jefa Comunal (foto Silvana Livigna)

Quilmes Compra en Casa, un alivio

Sobre la crisis económica que afecta especialmente a los comerciantes, aclaró que «nos cuesta más esta pandemia por el gobierno que tuvimos los últimos cuatro años» y dijo que el programa Quilmes Compra en Casa es un alivio para la economía local que lanzará pronto una aplicación de teléfono celular, porque por ahora solo se hace a través de WhatsApp.
«Veníamos de una situación de mucha gente de clase media que cayó en la pobreza y este parate refleja una dificultad mayor. Por eso el Gobierno Nacional dispuso distintas medidas que son una ayuda muy grande para todos los sectores», destacó.
Cuestionó a «una oposición a la que no le importa la gente que llama a no pagar impuestos y acá se pone en discusión el rol del Estado. Si quienes pueden no pagan, la salud pública no tiene forma de abastecerse, ni los docentes ni los trabajadores municipales».
Reconoció en este sentido que la recaudación municipal cayó un 70 % y la provincial un 50 %.
Negó tensiones de los intendentes con el gobernador Axel Kicillof y dijo que «estamos todos evaluando cómo hacemos para salir de este momento de la mejor manera».
Aseguró que el Servicio Alimentario Escolar junto al Municipio reparte 70 módulos de comida con la que se asiste a personas de barrios pobres y de clase media.
Sin embargo, la posibilidad de un «desborde social existe, uno no tiene que negarlo, pero estamos haciendo todo lo posible desde el Gobierno Nacional, provincial y municipal para contenerlo. El pueblo sabe que si hay una necesidad hay un Gobierno que la va a atender».
Lamentó el aumento de precios que se da tanto en comercios pequeños como en grandes cadenas, pero el Municipio no puede establecer una clausura, aunque puede aplicar multas.
«No se puede ser tan mala persona. Por más que quieras sacar ventaja y ganar dinero en esta etapa no te va a alcanzar para comprar un respirador cuando lo necesites. No se puede ser tan miserable», dijo.
Los sectores que quedarán más relegados son los boliches nocturnos, aunque se prevé una recuperación más rápida de restoranes, que deberán aplicar las medidas de distanciamiento obligatorias.

El trabajo de la oposición y la posibilidad
de que el HCD sesione de forma virtual

La Intendenta dijo que la oposición mantiene un trabajo «serio» frente a la crisis del coronavirus y que hay una relación permanente con los ediles que no pertenencen al partido oficialista.
Consideró que el Concejo Deliberante debería sesionar de cualquier forma -presencial o virtual- y que el Municipio otorgará los espacios para que se pueda sesionar sin riesgo sanitario.
«Si encuentran un lugar con las condiciones adecuadas me parece acertado. Hay temas que sí necesitamos sesionar, siempre y cuando no se pongan en riesgo. Si el Senado de la Nación y el Congreso pueden sesionar virtualmente, lo pueden hacer», indicó Mendoza.
Los encuentros podrían ser en la Casa de la Cultura sin la presencia de los asesores ni reuniones masivas.

Compartir