El Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires pone en marcha entre jueves (mañana) y viernes, una nueva estrategia de descacharrado en distritos bonaerenses, con la participación de hospitales e instituciones. El objetivo es eliminar todos aquellos recipientes que acumulen agua dentro y fuera de casa, ya que el mosquito vector del dengue tiene hábitos domiciliarios.
El Aedes aegypti, también transmisor del virus chikungunya y del zika, solo necesita agua quieta y un poco de sombra para dejar sus huevos y reproducirse, es decir que cualquier recipiente u objeto con una mínima cantidad de agua puede convertirse en un criadero. Por este motivo, es fundamental descacharrar en los hogares para evitar que el mosquito se reproduzca.
La Campaña “Tapá, Girá, Lavá y Tirá” apunta a esas tareas que resultan necesarias para prevenir el avance de la enfermedad: tapar tanques, tachos y depósitos que puedan acumular agua. Lavar con cepillo o esponja los recipientes, canaletas y desagües para desprender los huevos de mosquito. Tirar todos los recipientes en desuso, manteniendo los patios y jardines limpios, y las cubiertas de automóviles descartarlas o ponerlas bajo techo. Y girar todos los elementos que puedan acumular agua: vaciar baldes, colectores de aire acondicionado y portamacetas.
Con las jornadas de descacharrado, la cartera sanitaria provincial apunta a reforzar y acompañar a los vecinos en la realización de estas acciones en los domicilios particulares, en el ámbito de hospitales provinciales, y en diferentes instituciones de los distritos bonaerenses, como estrategia fundamental para frenar los contagios.
El dengue es una enfermedad que se transmite por la picadura de las hembras del mosquito Aedes aegypti. Cuando una hembra se alimenta de sangre de una persona enferma de dengue adquiere el virus y, al picar a otras personas lo transmite, es decir que el contagio solo se produce por la picadura del mosquito, no hay contagio de persona a persona.