Desde su llegada a Racing a comienzos de 2024, procedente de Instituto, Maravilla Martínez no hizo más que confirmar lo que muchos intuían: es un jugador distinto. En apenas unos meses, el delantero se transformó en una pieza clave para el esquema de Gustavo Costas, convirtiéndose no solo en el goleador del equipo, sino también en el alma ofensiva de la Academia.
Su rendimiento no pasa desapercibido. Con actuaciones cada vez más determinantes, la hinchada no tardó en corear su nombre y pedir, a viva voz, su presencia en la Selección Argentina. Y razones no faltan: con el partido ante Banfield, Maravilla llegó a los 61 encuentros con la camiseta de Racing y suma 39 goles, una cifra impactante para cualquier atacante.
“Hoy se nos dio. En lo personal, salgo a jugar de igual a igual, con la misma intensidad”, expresó el goleador tras el triunfo frente al Taladro. La victoria alimentó aún más la ilusión del Racing copero, que viene de dar el golpe en Brasil al vencer 3-0 a Fortaleza.
Martínez, que juega con la frescura de un juvenil y la madurez de un veterano, no se olvida del grupo: “Contento por el grupo, se lo merecía”, destacó, dejando en claro que sus logros individuales son también un reflejo del trabajo colectivo.
Mientras los goles siguen cayendo y los elogios se multiplican, Maravilla ya no solo deslumbra en Avellaneda: su nombre empieza a sonar fuerte en la órbita albiceleste. ¿Será Scaloni el próximo en darle la oportunidad?