En un escenario internacional donde tanto las potencias como los países de ingresos medios intensifican sus esfuerzos en políticas industriales, el rumbo adoptado por el Gobierno de Javier Milei en Argentina parece ir a contramano de esta tendencia. Mientras economías como las de Estados Unidos, China y la Unión Europea apuestan por fortalecer su capacidad productiva interna, el enfoque liberal del actual gobierno argentino plantea interrogantes sobre las posibilidades de desarrollo industrial a largo plazo.
Históricamente, la política industrial en Argentina ha oscilado de manera pendular. Durante los gobiernos peronistas, se promovieron estrategias para fomentar la producción manufacturera, aumentar las exportaciones, generar empleo y ampliar el número de empresas en el sector. En contraste, los gobiernos de corte liberal han tendido a priorizar la apertura económica y la reducción del rol del Estado, lo que ha llevado, en muchas ocasiones, a una retracción de los indicadores industriales.
En este contexto, una reciente investigación del centro Fundar analiza las tendencias globales y el estado de la política industrial en Argentina, ofreciendo recomendaciones para revitalizar este sector clave. El informe destaca que el actual auge de la política industrial en el mundo responde a una combinación de factores, como la necesidad de garantizar la seguridad de las cadenas de suministro, impulsar la innovación tecnológica y generar empleos de calidad.
Fundar propone una serie de medidas para mejorar el diseño de las políticas industriales en Argentina. Entre ellas se incluyen:
- Definir sectores estratégicos: Identificar áreas con alto potencial de crecimiento y valor agregado, como energías renovables, tecnología y economías del conocimiento.
- Fomentar la inversión pública y privada: Crear incentivos fiscales y financieros que promuevan el desarrollo de infraestructura y tecnología.
- Promover la integración regional e internacional: Diseñar estrategias para aprovechar acuerdos comerciales y fomentar la participación en cadenas globales de valor.
- Fortalecer la capacidad estatal: Garantizar una gobernanza eficiente que permita coordinar acciones entre los distintos niveles de gobierno y el sector privado.
El contraste entre el contexto global y las políticas actuales de Argentina plantea un debate crucial sobre el rumbo económico del país. Mientras otros países redoblan la apuesta por la política industrial como una herramienta de competitividad y desarrollo, Argentina enfrenta el desafío de definir si se sumará a esta tendencia o continuará en un camino divergente.
El informe de Fundar subraya que una política industrial efectiva podría ser una pieza clave para apuntalar el desarrollo interno, generar empleo de calidad y mejorar la competitividad internacional del país. Sin embargo, lograr este objetivo requerirá una visión estratégica y un compromiso político que trascienda las divisiones partidarias y los ciclos económicos.